Un artículo en Wired titulado «Olvidate de la Inteligencia Artificial, el Futuro es la Intelegencia Extendida» firmado por Joy Ito, el director del M.I.T. Media Lab señala «Debemos luchar contra la Singularidad, la IA no dominará el Mundo».
La noción de Singularidad, que incluye la idea de que la IA reemplazará a los humanos con su crecimiento exponencial, haciendo que todo lo que hemos hecho y lo hagamos insignificante, es una religión creada principalmente por personas que han diseñado y desplegado con éxito sistemas de computación para resolver problemas que antes se consideraban imposibles por ser demasiado complejos para las máquinas.
Comenta que ya existe un grupo que se opone contra el creciente movimiento de la Singularidad.
Ito simplifica que el crecimiento de la IA visto en curvas exponenciales es como los singularianos encuentran la superinteligencia y la abundancia. Pero que la mayoría de las personas fuera de la burbuja de Singularidad creen que los sistemas naturales se comportan como curvas normales o campanas, donde los sistemas responden y se autorregulan.
Si bien uno de los impulsores clave de la ciencia es explicar con elegancia lo complejo y aumentar nuestra capacidad de comprensión, también debemos recordar lo que dijo Albert Einstein: «Todo debería ser lo más simple posible, pero no más simple». Necesitamos abrazar la incognoscibilidad – la irreductibilidad – del mundo real conla que los artistas, biólogos y quienes trabajan en el desordenado mundo de las artes liberales y las humanidades están familiarizados y cómodos. La mayoría de los grandes problemas de nuestra época (cambio climático, pobreza, las enfermedades crónicas o el terrorismo moderno) pueden ser vistos como el resultado de nuestra búsqueda del mismo sueño de la Singularidad: el crecimiento exponencial. Son problemas extremadamente complejos producidos por las herramientas que se usan para resolver los grandes problemas anteriores, como empujar infinitamente la productividad o ejercer control sobre sistemas que, de hecho, se han vuelto demasiado complejos para ser controlados.
Concluye su exposición relatando que somos participantes en múltiples sistemas evolutivos a diferentes escalas, desde nuestros microbios hasta nuestras identidades individuales a la sociedad y nuestra especie. Los individuos mismos son sistemas compuestos de sistemas de sistemas, como las células de nuestro cuerpo que se comportan más como diseñadores de sistemas que nosotros. Como dice Kevin Slavin en su ensayo de 2016 Design as Participation: «No estás atascado en el tráfico, eres el tráfico».
Las máquinas con inteligencia emergente, sin embargo, tienen metas y metodologías perceptiblemente distintas. A medida que introducimos tales máquinas en sistemas adaptativos complejos como la economía, el medio ambiente o la salud, los veo aumentando, no reemplazando, a los humanos individuales y, lo que es más importante, aumentando tales sistemas.
En lugar de pensar en la inteligencia de la máquina en términos de humanos contra máquinas, debemos considerar el sistema que integra a los humanos y las máquinas, no la inteligencia artificial sino la inteligencia extendida. En lugar de intentar controlar, diseñar o incluso comprender sistemas, es más importante diseñar sistemas que participen como elementos responsables, conscientes y sólidos de sistemas aún más complejos.
Debemos cuestionar y adaptar nuestro propio propósito y sensibilidad como observadores y diseñadores dentro de los sistemas para un enfoque mucho más modesto: la humildad sobre el control.
Analizando el artículo de Ito, que critica profundamente a los Singularianos, comprendemos que existe un amplio movimiento de pensadores que nos están avisando que nuestro mundo va a cambiar de forma profunda. El Universo está en permanente cambio hacia la mayor entropía, pero lo hace de formas muy originales.
Seguimos preconizando que tenemos que tener muy claro lo que somos y sobre todo, nuestros valores éticos, para adentrarnos en la próxima estación del desarrollo humano. Desde este blog dedicado a la Medicina y sus Profesionales, insistimos en que debemos liderar y modular la relación entre los enfermos y los sistemas artificiales.
Tendremos mucha más información a nuestra disposición. No sé si tendremos más tiempo para absorberla. Por lo que tendremos que tener muchas cosas muy claras.