Muchos buenos profesionales médicos necesitamos guardar en el teléfono móvil datos y fotos de la patología de los pacientes.

Para recordar casos a completar, consultar con colegas, estudiar o investigar, existen múltiples razones legítimas para que un médico guarde esta información.

El beneficiario final es el propio paciente, o los futuros.

Hemos desarrollado unas Normas Éticas Básicas de la Toma de FotografíasMédicas que ponemos a su disposición (enlace)

Pero estos datos normalmente se entremezclan con los datos privados del facultativo y su familia… las fotos de lesiones se mezclan con la de los cumpleaños. A casi todos nos ha pasado el que pasamos una foto más y mostramos una herida o algo aún peor a un familiar no preparado para entender esa información.

Por otra parte, la información de salud puede ser muy peligrosa si cae en manos equivocadas. Varias situaciones:

- Según ciertos datos de salud una compañía de seguros puede no permitirle suscribir una póliza aunque usted esté sano, o incrementarle significamente la cuota. Los datos genéticos son el ejemplo máximo.
- Un empleador puede decidir no contratar o despedir a un trabajador por datos pasados de salud sin repercusión actual
- La vecina malévola puede amargarle la vida en el barrio si tiene datos veraces sobre su salud
- El patio del Colegio puede convertirse en un infierno si los otros colegiales se enteran de información médica que siquiera entienden

El Reglamento Europeo de Protección de Datos, RGPD, y su predecesora Ley Orgánica (LOPD), obliga a mecanismos de protección de los datos de los pacientes que ninguna aplicación móvil, hasta ahora, cumplía.

Debemos pensar que nuestro móvil se puede perder, se puede desbloquear por otro motivo, o el Servidor puede sufrir un ataque concertado.

Nuestro diseño se basa en la seguridad por encima de cualquier otra consideración.